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martes, 23 de septiembre de 2014

Estaciones

Hay días en los que dimensiono el paso del tiempo, tomo conciencia de aquello que fui y que ya no soy. Valoro cada etapa de mi vida y las personas que encontré en el camino. Sin ellas, nada sería.

Sólo el presente es real. Aun cuando mucho quedó en el pasado, hay canciones cargadas de recuerdos, que suenan hoy y me refrescan la memoria. Las huellas del ayer están ahí, algunas visibles, otras ocultas.

La magia de la música me permite revivir. Si bien la nostalgia me visita de vez en cuando, no le doy demasiadas atribuciones. Aprendo a relacionarme con el tiempo y a administrar mis experiencias.

El invierno se fue y llegó la primavera. Supongo que llegó el momento de salir al sol y disfrutar de la vida. Los días de encierro pasaron. Es tiempo de renovación.

Y así como los árboles y todo el ambiente se transforma con las estaciones, puedo notar también ese cambio dentro de mí. Sensibilidad a flor de piel.

Disfruto la inestabilidad. Lo confieso. ¡Qué aburrido sería estar siempre igual! Me declaro inestable, irremediablemente, para bien o para mal. Mis estados de ánimo son señales del cambio, de la metamorfosis permanente.


domingo, 14 de septiembre de 2014

La lección de Rata Blanca

Una analogía entre el heavy metal y el periodismo  

Rata Blanca me dio una lección. No soy fan de la banda, tampoco del heavy metal. Pero, valoro la existencia de quienes se mantienen vigentes como si no hubieran pasado los años. Reconozco que me encantan varios temas: “Mujer amante”, “La leyenda del hada y el mago” y “Volviendo a casa”. Los temas más populares y comerciales, dirían los fanáticos.

Walter Giardino (guitarrista), Adrián Barilari (vocalista), Danilo Moschen (tecladista), Fernando Scarella  (baterista) y Guillermo Sánchez (bajista) llegaron a Ciudad del Este el jueves 11 de septiembre pasado, luego de ocho años, para dar un concierto previsto para el día siguiente.

Participé de la conferencia de prensa que brindaron en el Hotel Convair, como una periodista más de cobertura. Pero fue esa tarde, escuchando las declaraciones de Giardino y Barilari, que saqué ciertas conclusiones que me motivaron realizar una analogía, entre la experiencia de esta banda de heavy metal y el periodismo que tanto amo.
Conferencia de prensa de Rata Blanca en Ciudad del Este.

Rata Blanca, una banda argentina formada en 1986, es considerada una de las más importantes e influyentes del heavy metal en español, aunque durante su carrera también han incorporado hard rock, power metal, speed metal y metal neoclásico, combinando pesados riffs con estructuras melódicas y armónicas de la música clásica.

La banda celebra 25 años de trayectoria. Aún con el paso del tiempo, mantiene su popularidad y respeto en el ámbito musical. “Rata Blanca es una banda auténtica, real, de músicos que hacen lo que les gusta. No sé si hay un secreto. Solo puedo decir que hay que ser auténtico”, respondió Giardino, cuando una colega le preguntó ¿cómo -aun cuando cada vez surgen más artistas- ellos siguen vigentes?

El guitarrista e impulsor de Rata agregó: “A los chicos potenciales les diría que crean en ellos, que amen lo que hacen. La fama no es lo más importante”.

Un amigo metalero, a quien respeto por su pasión y conocimiento del estilo, me comentó un poco de la historia de Giardino, hecho que me llevó a admirarlo como persona, más allá de su talento como músico.
Walter Giardino, durante el concierto de Rata Blanca en CDE.

Rata Blanca es justamente un experimento con resultados extraordinarios. Fue creado por Walter cuando salió del grupo V8 en 1985. Inicialmente se grabaron cuatro temas para incluirlo en un demo que sería presentado en Inglaterra. Sin embargo, las composiciones tuvieron tanto éxito que se quedaron en Argentina.

El grupo sufrió varios cambios, en cuanto a sus integrantes. Sin embargo, mantuvo su esencia. “Cantar es algo mágico, no es algo que se enchufa y suena", dijo Adrián Barilari, consultado sobre las nuevas voces del rock en Latinoamérica. Actualmente los grupos se caracterizan por priorizar la imagen, el show y el marketing, antes que la calidad de la música. Y en ese sentido Barilari señaló que “hubo un tiempo en los 80´ y 70´ en los que la voz era sumamente importante. Pero hoy en día se dejó de lado tener un buen caudal de voz”.

Rata Blanca es una banda que considera que todos sus conciertos son importantes, desde aquellos multitudinarios, como aquellos con menor concurrencia. “Los shows pequeños son más íntimos”, dijo Walter Giardino.

Y fueron estas declaraciones las que me hicieron pensar en la importancia de hacer lo que uno ama y perseverar. Cuenta la historia de la banda que a finales de los 80´, cuando recién comenzaban, hacían sus presentaciones a pulmón, no dejaban ganancias y trataban de conseguir todo asumiendo deudas. Sin embargo, llegaron a convertirse en un ícono del heavy metal latinoamericano.
Concierto de Rata Blanca en Ciudad del Este (12/09/14).

Giardino también señaló durante la conferencia de prensa que nunca fue un buen negocio para las bandas de Latinoamérica hacer alianzas con las discográficas, porque estas apoyan ideológicamente ciertos estilos.

"Hay cierta actitud de parte de las discográficas que marcan las tendencias. Apoyan estilos ideológicamente. Siempre van a estar más para el pop, lo latino, romántico, que yo lo veo bien. Pero lo que yo no veo bien es que ignoren al rock con lo que el rock mueve. Ahí es donde uno piensa que la cuestión es ideológica. No sé de dónde viene, si es una cuestión de evitar que la gente piense, que la gente tome decisiones en su vida, que sea fuerte espiritualmente…", afirmó.

Siempre existirán estilos más comerciales que otros. Tanto en la música como en el periodismo, existe el gran desafío de triunfar con autenticidad. Existe cierto periodismo que ideológicamente es funcional al sistema, razón por la cual cuenta con respaldo económico y político.

Las condiciones no son favorables en Paraguay, un país con monopolio mediático. Tampoco en Ciudad del Este, donde la mayoría de los medios que hasta se unen en redes, son controlados también por un grupo político.  ¿Cómo hacer un periodismo contra esta corriente, auténtico y con independencia?

Rata Blanca es en el heavy metal lo que en el periodismo podría ser un proyecto de comunicación independiente. Me atrevo a sacar esa conclusión y a experimentar como en su momento lo hizo Giardino. Se trata de jugarse por lo que uno ama, hacer lo que uno quiere más allá de las circunstancias adversas.

Existe la tendencia de entender la música y el periodismo como cuestiones sin ideología. Sin embargo, están cargados de ella. Reconocerlo es fundamental y seguidamente, animarse a caminar.

Y como dice Rata en su tema “Guerrero del arco iris”:

Gerrero, sólo tú puedes
ganar con la verdad.
luchemos por los que vienen,
por ver felicidad.



viernes, 22 de agosto de 2014

Al tajy de mis amores

Querido Tajy
¡Gracias por tanto color!
¡Gracias por tanta alegría!
Gracias por engalanar mis pasos
con alfombra de flores

Tajy sa´yju
amo el contraste de tu copa
con el cielo azul profundo


Tajy pytangy
te encuentro siempre
y por momentos puedo creer
que la vida es color rosa
  
Tajy morotĩ
difícil de hallar
fácil de admirar




sólo quería decirte
que verte cada mañana
hace mi agosto menos largo
más llevadero
más intenso
deja de ser un agosto hendy
aquel que se busca enfrentar con el carrulim
contigo cada mañana
vivo un verdadero agosto poty.


domingo, 17 de agosto de 2014

Existencia

Vacío. Miro adentro y nada encuentro. Respiro. Escucho canciones que me transportan al pasado. Nostalgia. Extraño quien era, quien ya no logro ser. La esperanza se fue de vacaciones. Me cuesta sonreír. Es invierno más adentro que afuera. Lapachos floridos, color por todas partes. Sol radiante, cielo azul, profundo. Pero yo... soy un ser que contempla, en silencio, en soledad. 

Por momentos, interpelo a mi soledad y le pido respuestas. ¿A dónde fueron mis ganas de luchar? ¿A dónde se fue la esperanza? Todo lo que antes me indignaba, hoy parece ser sólo una realidad inmutable, parte del paisaje al que muchos se han acostumbrado, y parece que yo también. 

Extraño quien era, quien no logro ser. Ya no tengo a quien entregarle mis problemas. La soledad es mayor. Soy quien administra mis dilemas, mis certezas se convirtieron en dudas. 

Tengo que reconocer que antes era más fácil. Contaba con la fe en ese ser todopoderoso, que mis padres me enseñaron a creer. Si... podía conversar con él y entregarle mis problemas, compartía todo con quien me conocía plenamente, no necesitaba darle muchas explicaciones. No me sentía del todo sola. 

Pero ahora... las cosas cambiaron. Es irreversible. No hay como volver atrás. Desapareció, se esfumó. Aunque quiera, esa conexión es imposible, no soy la misma. La búsqueda es mi presente. No hay un manual de instrucciones, ni un mapa que me indique el camino. No hay misión encomendada, ni fundamento de mi existencia. Existo y eso es todo.


martes, 5 de agosto de 2014

Cálido invierno

Impensable quedar en la penumbra
cuando afuera brilla sol
es invierno
pero no parece

Me senté en un banco
en la plaza de mi adolescencia
me quedé el tiempo suficiente
para  devorar seis mandarinas


en ese lapso de sabor y calor
me contagié de la risa
de los niños jugando al fútbol
de las niñas en las hamacas y el tobogán

Cálido invierno
un poco de sol y alegría infantil
es todo lo que necesito
para volver a la penumbra
y seguir escribiendo. 

lunes, 28 de julio de 2014

El arte y la urgente transformación social

Cuando Ciudad del Este era sólo una hostil zona boscosa, hubo quienes se animaron a convertir un territorio inhabitado, en un polo comercial conocido a nivel mundial. Históricamente referenciada por el comercio, la capital de Alto Paraná va construyendo poco a poco un nuevo perfil y se va divisando un rostro cultural, luminoso, diverso y liberador.

Esta transformación es el resultado de un proceso de décadas. Los habitantes se convierten de a poco, en ciudadanos preocupados por la vitalidad del lugar donde fijan residencia. En esta región donde predomina la oferta y la demanda, las leyes del mercado, el trabajo/lucro como única razón de vida o sobrevivencia, existen verdaderos pioneros del arte y personas que se dedicaron a formar cantantes, instrumentistas, bailarines, actores, escritores (entre otros), aún sin apoyo estatal. En los últimos años, la siembra va dando sus frutos.

Los pobladores de Ciudad del Este empiezan a tener opciones para deleitarse en un concierto, una obra teatral, una función de cine. Anteriormente, debían cruzar al otro lado del río Paraná, en busca de una actividad cultural.

En este contexto, se crea la Sociedad Filarmónica Alto Paraná, que el 26 de julio pasado hizo vibrar al público esteño con el Concierto Debut de la Orquesta Alto Paraná. Músicos locales que han estudiado en el exterior, bajo la dirección del maestro Juan Ramón Vera, interpretaron composiciones de música clásica internacional, de autores como J.S. Bach, W.A. Mozart y A. Vivaldi, y de grandes maestros paraguayos como José Asunción Flores y Herminio Giménez.
Concierto debut de la Orquesta Alto Paraná en CDE. 

La Sociedad Filarmónica Alto Paraná se creó con la misión de “Contribuir decididamente a difundir y fortalecer el arte musical en Ciudad del Este y Alto Paraná (…)”. También busca “la creación de espacios para la formación artística-intelectual de vecinos y ciudadanos, la creación de agrupaciones corales o instrumentales basadas en el principio de la excelencia tanto artística como humana, promoviendo en estas la disciplina, la creatividad y el enriquecimiento de la cultura e identidad nacional”.

Se trata de un emprendimiento independiente que surge como respuesta a una necesidad imperiosa en Ciudad del Este. Juan Ramón Vera, director de la Orquesta Alto Paraná e impulsor de la Sociedad Filarmónica, indica que la idea es llevar el arte a la comunidad y de esta manera lograr una necesaria transformación social.

La creación de la Sociedad Filarmónica converge con el trabajo que en simultáneo realizan numerosos institutos de enseñanza de arte en Alto Paraná. Cabe recordar que hace tres años (2011), se creó la Escuela Superior de Bellas Artes de la Universidad Nacional del Este, que ofrece licenciaturas en Música, Danza, Teatro y Artes Visuales. La ESBA busca profesionalizar a los artistas y formar verdaderos gestores culturales. Todos, desde sus respectivos espacios, contribuyen al desarrollo cultural de Ciudad del Este y Alto Paraná.

Las expresiones artísticas deben multiplicarse, principalmente en esta región, donde existe una marcada desigualdad social, predomina el trabajo informal, las redes del narcotráfico invadieron los barrios y acechan hasta las escuelas, la trata de personas es una realidad, la delincuencia juvenil es tapa de diarios todos los días. Y no se trata de utilizar el arte como “una herramienta de control social” sino todo lo contrario, como la manera en que las personas sin distinción de edad, género, raza o religión, expresen libremente aquello que inquieta/duele/conmueve/alegra.

El arte es comunicación y los espacios culturales son espacios de diálogo. Por lo tanto, siempre que existan niños, jóvenes y adultos, hombres y mujeres, dispuestos a crear espacios para la expresión artística, entonces hay esperanza, entonces se puede creer que pese a los problemas profundamente arraigados, se puede hacer de este territorio, un lugar mejor.


martes, 15 de julio de 2014

¿Qué es la vida? ¿Qué es vivir?

Sobre-vivimos
Nos dedicamos a cumplir 
parámetros impuestos
¿Para qué?

Desde que nacemos
hacemos preguntas
 y aún antes de nacer
existen respuestas prefabricadas
que aparecen con el paso del tiempo...

Nos niegan el derecho a la búsqueda
el derecho a equivocarnos
el derecho a aprender
a evolucionar...

Mucho de lo que tenemos 
no necesitamos para vivir
y así postergamos
lo que nos hace feliz.

jueves, 20 de febrero de 2014

Suspiro libertario

Cuando la nostalgia no cabe en el pecho
Y oprime el corazón
Solo resta suspirar

Recuerdos…
De una intensidad inconsciente
De tus ojos sinceros que no vi
De la canción que hoy invoca tu nombre

No fue amor, pero fue algo parecido
Estuvimos tan cerca
hoy estamos tan lejos

Nostalgia…
Un nudo en la garganta
Suspiros
El viento en mi cara
El cielo nublado
Primavera con sabor a invierno

En esta noche fresca
Camino por calles solitarias
Pensándote
Recordándote
Extrañándote
No fue amor, pero fue algo parecido




domingo, 16 de febrero de 2014

Filosofía urgente

El cambio es permanente
la única certeza 
es la incertidumbre
pensar parece estar prohibido
preguntar, un acto revolucionario
en un sistema opresor
con fachada democrática
la filosofía es urgente

¿Cómo educar?
Amando…
gestando revoluciones
sembrando utopías

La vida es aprendizaje
¿vivimos?
¿aprendemos?
¿cómo educar?

Educar para aprender
educar para la libertad
educar para la vida
toda la vida

amando. 

jueves, 23 de enero de 2014

Una historia con sabor a durazno

Las calles de Ciudad del Este están cargadas de emociones contradictorias. Todo se mueve muy rápido. La gente camina siempre de prisa. Otros permanecen sentados, esperando, como si el tiempo no existiera.

Preguntas movilizadoras. Justamente, aquellas interrogantes que interpelan la realidad, me llevaron al centro de la ciudad, esa calurosa mañana de martes. Con la idea de recabar opiniones, empecé mi recorrido periodístico buscando alguna mirada cómplice, que accediera a responder.

Me crucé con un humilde vendedor de frutas. Estaba a punto de vender una docena de bananas cuando me acerqué con el micrófono y el cliente huyó despavorido. Me sentí mal de haber espantado con mi inofensivo elemento de trabajo al comprador. “¡Con lo difíciles que están las cosas en el centro y yo causando perjuicios a un trabajador!”, pensé.

El vendedor de frutas sonrió y accedió al pequeño sondeo que pretendía iniciar. “¿Cuál es el futuro de Ciudad del Este?”, le pregunté. Me dijo textualmente: “que el presidente se preocupe en serio por los pobres y no sólo por el bienestar de los ricos. Que haya trabajo para todos y no sólo planes para beneficiar a los empresarios”. Y entonces rogué que sus palabras no sean un grito en el desierto. Le di las gracias por responder ante la cámara y al despedirme, me regaló un durazno.  

Me impresionó una vez más la generosidad de quien nada yo esperaba. No tenía un bolso, así que con el durazno en una mano y el micrófono en la otra, continué el recorrido con mi compañero, cámara al hombro.

Seguimos formulando la pregunta, que no fue bienvenida en todas partes: ¿Cuál es el futuro de Ciudad del Este? Algunos prefirieron no hablar y pude notar cómo el peso de la decepción aplastó su esperanza. Otras personas optaron por expresar lo primero que les vino a la mente, sin pensar demasiado. Pero siempre existen aquellos, que al parecer, esperan la oportunidad de hablar y sentirse escuchados, como si pudieran liberar quebrantos atascados en la garganta.

Finalizamos el recorrido por las calles turbulentas y ardientes. Yo seguía con el durazno en la mano. La fruta fue testigo y compañera de caminata. Pensaba comerla como postre después del almuerzo. Esperábamos regresar al canal, cuando se nos acercaron dos niños, con la intención de vendernos sus caramelos. No tenía dinero. Uno de ellos, vio el durazno y me pidió. No dudé en dárselo y lo tomó con alegría. El otro niño, también lo quería y se inició una puja, hasta que decidieron compartir. Al verlos, pude notar que devoraron juntos la fruta como si fuese el primer alimento del día.

El durazno llegó a mis manos como un regalo y mantuvo su esencia. Recorrí las calles con la fruta que finalmente, sació el hambre de esos niños trabajadores. Son esas pequeñas cosas las que me hacen pensar que no todo está perdido, porque más allá de la crisis y la pobreza, siempre se puede ayudar. Entonces me sigo preguntando… ¿Cuál es el futuro de Ciudad del Este?