La
película 7 cajas, además de un éxito de taquilla del cine nacional, es una
invitación a todos los paraguayos, a observar detenidamente su realidad, apreciar
y/o cuestionarse los mínimos detalles. Impresiona la capacidad de los
realizadores de captar la esencia de la paraguayidad y reflejarla en esta obra
cinematográfica.
La
escenografía es el mercado 4 de Asunción, un mundo escondido, pero a la vista
de todos. Un espacio que supieron explotar hasta el último recoveco. Los personajes
son historias reales de sobrevivencia diaria. Son los excluidos sociales,
destinados a ser los protagonistas de la crónica policial del día siguiente. Convertidos
en criminales intentando pagar el precio de vivir, de comer, de un remedio, de
parir, de soñar.
La
película se centra en la odisea de un adolescente, carretillero del mercado,
cuya máxima aspiración es tener un celular y salir en la televisión. Proyecta
su vida en base a las pautas que le marca la sociedad de consumo. Dispuesto a
transportar lo que sea con tal de tener, en este caso un teléfono móvil, pero
en el fondo es la lógica del mercado, “tener para ser”. En todo ese contexto,
la vida vale nada.
La
precariedad policial, la filosofía del “favor con favor se paga”, la lucha del
día a día, el machismo, el hombre paraguayo que ordena a la mujer sin explicaciones,
que no se comunica y sólo impone.
7
cajas es una película que podría verla una y otra vez. El público en el cine es
un pueblo que se mira al espejo, que se ríe de sí mismo y de esas prácticas
populares, tan comunes y algunas nocivas, que mira una realidad dolorosa y
aunque cala hondo, al final se olvida.
Quiero
muchas películas iguales a 7 cajas y cada vez mejores. Nuestro país se está
acostumbrando al buen cine nacional y espero que se siga apoyando lo nuestro.
Es un logro de los productores audiovisuales en Paraguay, quienes en medio de innumerables
obstáculos lograron dar a luz este film. Más que una película, se trata de fomentar
la posibilidad de crecer como pueblo, mediante la autocrítica que nos genera el
contenido del cine.
Las
palabras nunca serán suficientes para expresar todo lo que me generó está
película, a veces (casi siempre) me dejo llevar por las emociones.
¡Corré
Víctor! Que en seguida te alcanza otra película paraguaya.
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