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lunes, 30 de abril de 2012

Se va abril

Siempre me gustó el mes de abril. No sé por qué. Tal vez porque en Paraguay llega el otoño con su brisa, su sol y sus hojas secas… O tal vez porque es el mes del libro, el periodista y el maestro.

Este abril, puse en crisis mis certezas y me llené de preguntas. No es la primera vez, siempre me cuestiono si valen la pena tantos interrogantes y si no es complicarme la vida. Algunos me dicen que es mejor no pensar para evitar problemas, pero no puedo evitarlo, es una necesidad.

Esta fase de preguntas se caracteriza por la soledad. Me encierro en burbujas de silencio, busco respuestas y quedo en un estado contemplativo. El mundo sigue girando y no importa que tan desordenada esté mi cabeza, hay que cumplir la rutina, sólo reacciono mecánicamente. Son días insípidos.

Me rebusco en esos libros que siempre están cerca, esperando el momento oportuno. Se me ocurre abrirlos, sumergirme en sus páginas. Voy de un libro a otro y luego paso a internet, donde quedo por horas.

Preguntas y más preguntas, parece que voy a enloquecer. Es ahí cuando decido salir del caparazón para relacionarme con otros seres tan sedientos de mundo como yo, mis amigos.

Doy gracias a Dios porque siempre están ahí para acompañar mi proceso de aprendizaje. Ellos no tienen respuestas, me generan nuevas preguntas, me recetan más libros, me regalan canciones y poesía. Compartimos experiencias de vida y hacemos historia, escarbando el pasado, diagnosticando el presente y proyectamos futuros posibles, algunos cargados de utopía, otros de simples consecuencias.

 Es como ingresar a un mundo paralelo al real, ideal, el mundo de los valientes y soñadores. Una vez ahí podemos pasar horas, encontrando la solución a todos los problemas globales, sociales, económicos y existenciales del ser humano.

Y después de todo me pregunto, ¿cómo aplicamos todo esto? No se trata de ir por la vida chocando contra el muro de la realidad ni aislarse del sistema vigente, sino insertarse nadando contra la corriente.

“Las lecciones de la realidad no matan el idealismo, lo educan”, sostiene José Ingenieros.

Esta vez, abril fue el mes de las preguntas… Se va abril, encontré algunas respuestas, algunos signos de interrogación siguen ahí, palpitando en mi cabeza.

Atravesar el mar de preguntas, siempre implica cierta inestabilidad en mi rutina diaria, aun así no cambio este viaje hacia la verdad por nada del mundo.

Se va abril, pero el viaje continúa… llegaremos a tiempo. 




viernes, 27 de abril de 2012

A desaprender

Y ahí estábamos otra vez, periodistas, docentes y estudiantes de comunicación, un 26 de abril, hablando de la cruda realidad, contando lo que ya sabemos, que la mayoría de los medios en Paraguay son propiedad de grupos empresariales ligados al poder político.

Panel en el salón de actos de la Facultad de Filosofía
de la Universidad Nacional del Este (26-04-12).
Escuchando sobre lo difícil que es ejercer la profesión en precarias condiciones laborales, la necesidad de convertirse en productor publicitario para juntar el salario del mes, las presiones políticas en los medios, etc.

Y mientras escuchaba el panel denominado Vivencias periodísticas, dividido en los ejes: “Obstáculos en el ejercicio del periodismo” y “Periodistas en la política” me preguntaba: ¿Estamos condenados a trabajar en esos medios? ¿Es la máxima aspiración o única opción de un periodista?

Sentí ganas de preguntar a todos los presentes: ¿Cómo ejercer el derecho a la libertad de expresión bajo el monopolio empresarial y político de los medios de comunicación? O mejor, ¿es posible generar medios alternativos de comunicación?
¿Por qué no pensar en el periodista como propietario de un medio de comunicación o un profesional con perfil emprendedor?

Pero preferí callar, dejar que fluya el debate y escuchar los diversos puntos de vista. Fue entonces que escuché declaraciones que prefiero olvidar y que espero, los estudiantes no lo hayan anotado entre sus apuntes, como aquellas frases “célebres” que marcan una visión profesional.

FRASES CÉLEBRES

“En la dictadura se ejercía mejor el periodismo, lo máximo que te pasaba era un estirón de oreja del director, pero más allá de eso había más libertad”, Alberto Rolón Dettone, director de Radio Paraná de Presidente Franco.

Panelistas (de izq. a der.): Alcides Gavilán, Carlos Bottino,
Aberto Rolón y Mariana  Ladaga. 
“Vivimos bajo la dictadura del proletariado”, Alcides Gavilán, director deportivo de Radio Parque.

Con el debido respeto que merecen estos dos pioneros de la radio en Alto Paraná, disiento totalmente con sus ideas.

¡¿En la dictadura se ejercía mejor el periodismo?! Es nada menos que reproducir la visión de que en la época de Stroessner se vivía mejor.

Parece que el radialista Alberto Rolón ignora que durante la Dictadura Stronista fueron clausurados varios medios de prensa, sin contar los miles de asesinados, desaparecidos y exiliados del régimen, simplemente por pensar diferente, sospechas de vinculación con el Comunismo o parentesco con políticos opositores.

¿De qué libertad estamos hablando?

Otra frase célebre de la noche fue: “Vivimos bajo la dictadura del proletariado”.

La Real Academia Española define al proletario como persona de la clase obrera, por ende, entendido el concepto de proletariado pregunto: ¿La clase obrera gobierna el Paraguay? ¿Se respetan los derechos del trabajador? ¿Existen condiciones dignas de trabajo en nuestro país?

Estimado Alcides Gavilán: Si en Paraguay reinara el proletariado, estoy segura que no existiría tanta precariedad laboral justamente en el ámbito periodístico, hecho que también se mencionó y lamentó en el panel.

A modo de contextualizar la frase, el radialista expresó la frase cuando se  debatía sobre la cobertura mediática del Caso Ñacunday y se analizaba el por qué los carperos agredieron a periodistas.

En un intento por comprender el pensamiento de estos dos radialistas, que pese a sus declaraciones, admito, son referencia del periodismo altoparanaense por sus años de trayectoria y tienen un elevado nivel de audiencia, lo único que puedo suponer es que son el resultado de la Dictadura.

Son precisamente el ejemplo vivo de la mentalidad que debemos cambiar en este país. Quiero recordar que los periodistas son formadores de opinión pública. Y escuchando a estos dos radialistas, entiendo por qué la mayoría de los paraguayos respondió poco tiempo atrás que quisieran el regreso de la dictadura en Paraguay.

Lo único en lo que sí estoy de acuerdo con Alberto Rolón es que como dijo: “El periodista es un eterno aprendiz”.

Al terminar el panel debate me preguntaron: ¿Qué aprendiste Sofi? Y me fue difícil responder.

Esta vez, lo único que puedo decir es que en Paraguay los periodistas necesitamos desaprender las prácticas antidemocráticas. A los estudiantes de periodismo les invito a leer sobre la historia de nuestro país, conversar y analizar la política y la sociología. Sobre todo les recomiendo el libro: Comunicación y Democracia del sociólogo Diego Segovia, donde se analiza la influencia de los medios de comunicación en el discurso político y podrán además, conocer en poder de quiénes están los medios masivos de comunicación en nuestro país.  

Muchos universitarios carecen de sentido crítico ante la realidad nacional. Empiezan a trabajar en un medio de comunicación sin capacidad de discernimiento y son adoctrinados con posturas del medio. De esa manera aprenden a ver la realidad en base a la línea editorial del medio en que trabajan.

Así nacen periodistas reproductores del discurso de los grupos de poder, un discurso que construye el espejo de una realidad en la que se mira la gente y así se toman las decisiones que definen el rumbo del país.  

Es oportuno preguntarse: ¿Por qué y para qué quiero ser periodista? Son preguntas medio existenciales, pero fundamentales para periodistas de raza.

El mundo del periodismo está lleno de coincidencias y disidencias, de preguntas y respuestas, es un mundo amplio y divertido. Lo conozco poco aún. Vale la pena explorarlo y sobre todas las cosas, disfrutarlo. Queda sólo decir: ¡Felicidades periodistas!


martes, 24 de abril de 2012

¿Dónde está el compromiso con los niños de Alto Paraná?

El Código de la Niñez y la Adolescencia sigue siendo letra muerta para los concejales departamentales de Alto Paraná, quienes este martes en sesión ordinaria, negaron la concesión de un predio de la Gobernación, para la construcción de un hogar para niños en situación de calle.

Un monto no rembolsable otorgado por la Agencia de Cooperación del Gobierno de Corea (Koica), de más de 2 millones de dólares para la edificación del albergue, podría perderse si para fines de abril, la Secretaría Nacional de la Niñez no consigue terreno.

Esta vez, un proyecto para el rescate de niños y adolescentes de las calles podría quedar nuevamente condenado a los papeles, por negligencia del Gobierno Departamental. Es triste, pero real.

LA LEY ES LA LEY

El Capítulo III de la Ley 1680 crea los CONSEJOS DEPARTAMENTALES DE LA NIÑEZ Y ADOLESCENCIA.

En su artículo 44 el Código establece que estos consejos deberán estar integrados por el Gobernador, la junta departamental,  los respectivos Secretarios Departamentales de Salud y Educación, las organizaciones no gubernamentales de bien público y sin fines de lucro del departamento, que realicen acciones dirigidas a los sujetos de este Código; las organizaciones de niños del departamento, y los Consejos Municipales (?).

Los integrantes del Consejo Departamental no percibirán remuneración alguna por el  ejercicio de esta función y se reunirán cuando el Gobernador lo convoque. Fijará su domicilio en la Capital del departamento.

Esta instancia brilla por su ausencia.

Las funciones de este Consejo según el artículo 45 son:
a) aprobar los planes y programas para el departamento y apoyar la ejecución de los mismos; 
b) apoyar a las municipalidades del Departamento para la ejecución de los programas respectivos y,
c) dictar su reglamento.

En Alto Paraná este Consejo tuvo algunas esporádicas reuniones donde por supuesto no faltaron bocaditos, lindos discursos y fotos para los medios de prensa, pero jamás hubo una acción concreta en beneficio de los niños y adolescentes.

El bienestar de los niños y adolescentes es responsabilidad de todos. Estos concejales departamentales se llenan la boca con discursos a favor de la niñez, pero a la hora de aprobar proyectos concretos, pesan más sus intereses políticos y las diferencias ideológicas.

Si sospechan hechos de corrupción, existen los mecanismos de control correspondientes. Sin embargo, cuando no existe voluntad política, nunca faltan excusas.



Deberían hacer un favor a la ciudadanía y abandonar la política. 

*Infografía publicada en el Diario TN PRESS de Ciudad del Este.


jueves, 19 de abril de 2012

Hijos de la tierra

Una imagen vale más que mil palabras...



A propósito del Día del Indio Americano, esta fotografía nos recuerda que el indígena y la naturaleza tienen una relación de intimidad única que los hace extremadamente dependientes, no hablamos sólo una cuestión biológica, sino cultural. Hoy ya casi no existen bosques, las aguas están contaminadas y los pueblos indígenas están casi en extinción.

El Día del Indio Americano debe ser una fecha de reflexión y toma de conciencia sobre el respeto a los pueblos indígenas y su cultura. 

Siempre me declaro ignorante en muchas cuestiones que tienen que ver con el mundo indígena, tan amplio y lleno de sabiduría. Pero más allá de mis limitaciones, los respeto profundamente, sobre todo porque tenemos demasiado por aprender de ellos. 

La mujer indígena de esta fotografía es una lección viva, aprendamos. 
¿Por qué el 19 de Abril es el Día del Indio Americano?

El 19 de abril de 1940 se celebró en Patzcuaro (México) el primer Congreso Indigenista Interamericano para una Conferencia Interamericana Indigenista, con el objetivo de salvaguardar y perpetuar las culturas aborígenes de todo el continente. Participaron indígenas representantes de poblaciones autóctonas de diversas regiones de América. Se habló de la situación social y económica de estos pueblos, de sus problemas y sus necesidades. Esta conferencia produjo un documento que creó el Instituto Indigenista Interamericano, con sede en esta ciudad de México y dependiente de la OEA. Así se instituyó el Día Americano del Indio, en conmemoración a este acontecimiento.

Desde entonces, el continente americano celebra esta fecha en recuerdo de quienes habitaron originariamente este territorio, imprimiendo allí las primeras esencias culturales.

*Foto: Naturaleza Paraguay (Programa de TV Red Guaraní)

domingo, 1 de abril de 2012

La edad del cielo

Cuesta vivir el presente cuando se sueña tanto con un futuro mejor. La utopía nos hace avanzar, pero la ansiedad es nociva cuando se hace compañera de la soledad y traiciona. ¡Tantas cosas pueden pasar desapercibidas en este trajinar rumbo al ideal!

En este camino hubo etapas mágicas... pero acabaron. Ahora el desafío es encontrar lo mágico en lo cotidiano, volver a encontrar sentido a la rutina. 

Aún hay mucho mundo por descubrir, los pies están inquietos, pero inmóviles a la vez. Queda sólo volar con la imaginación, pero esos viajes son ahora inoportunos.

Es el tiempo de estar aquí, exactamente donde estoy y aprovechar lo que ofrece el presente.

Podemos, si queremos, tener la edad del cielo... como dice Jorge Drexler.



¿Generación perdida?

*Análisis personal de un documental recomendado. 

Es como mirarse al espejo y hasta visualizar el futuro.

El documental ¿Generación perdida? realizado por reporteros de la Televisión Española, presenta cómo la crisis económica pone en riesgo los sueños de jóvenes en España. Se trata de la generación de la democracia, los mejor preparados académicamente hablando, pero con escasas posibilidades de conseguir empleo y de aplicar sus conocimientos.

Haciendo un análisis, me atrevo a comparar la realidad de la juventud española con la paraguaya. En Paraguay, la crisis económica siempre fue un factor en contra de la juventud. Los jóvenes paraguayos enfrentan la crisis desde siempre y sobrevivimos.  

Una mala señal

Pregunto nomás: ¿Qué piensa un candidato al idear una campaña política? ¿Desde cuándo ensuciar las calles con panfletos de propaganda es un método válido para captar votos?

Por lo visto, nuestros candidatos no son capaces de pensar en métodos alternativos y ecológicos para realizar su campaña política.

Si ni siquiera son capaces de idear una campaña que no atente contra el ambiente, no creo que sean capaces de gestionar una institución pública.

La mayoría de los candidatos no encuentran mejor forma de promocionar su figura que empapelando la ciudad con su fotografía.

Sólo por dar un ejemplo, las calles de Cuidad del Este y distritos aledaños se llenaron de panfletos de propaganda política en estos días previos a la consulta nacional realizada por el Partido Liberal.

¡Hay tantas otras formas de promocionar o difundir un mensaje! Y de hecho estoy convencida de que la mejor campaña son las obras realizadas, la trayectoria política, profesional y personal. “Por sus frutos  os conoceréis…”

Señor candidato: Ensuciar la ciudad es una mala señal. No capta, ¡espanta votos!Haga un favor a la ciudadanía y mínimamente, instruya a sus operadores para una campaña más creativa y ecológica. ¿Ikatu pio?

Mis maestros de periodismo

Nunca voy a olvidar aquella vez que me tocó cubrir un concierto de la guitarrista paraguaya Berta Rojas en Ciudad del Este. Fue un recital diferente ante un público muy peculiar: niños y adolescentes.
Luego de escuchar la magnífica interpretación de Berta, quien con su guitarra rindió un tributo a Agustín Barrios, se abrió un espacio para preguntas y me llevé una hermosa sorpresa. Los niños no paraban de preguntar, y tanto Berta como los demás adultos, no podían evitar el asombro.
Los chicos se dirigían a Berta con inocencia e ingenuidad, sin dar muchas vueltas preguntaban muy seguros de lo que querían saber, por momentos descolocaban a la guitarrista pero sin mala intención. Sus preguntas lograron extraer la esencia de la intérprete, su perfil humano, de mujer y profesional. La entrevista colectiva enriqueció a todos...

Ese día aprendí de ellos y pensé: "Ojalá todos los periodistas preguntaran como los niños, sin malicia pero directo al grano, sin ninguna intención más que el saber".
Pensar en los niños y relacionarlos con el periodismo me es inevitable. Dicen que los niños siempre dicen la verdad, en cambio los periodistas intentan decirla todos los días.
No es casualidad que para comunicar muchos hayan optado por la figura de los niños para decir cosas que a los adultos les cuesta decir, tal vez porque cada vez más, los adultos pierden credibilidad.
Otro factor común. ¿Por qué será que los niños son a veces más creíbles que los adultos? Y si queremos continuar con la relación niñez-periodismo, ¿qué pasa con los periodistas?
Tampoco puedo evitar recordar al maestro Quino, quien a través de la pequeña Mafalda hace cuestionamientos políticos, sociales y existenciales contundentes. ¿Quién no disfruta las locuras y el espíritu revolucionario de esta eterna niña?
También me viene a la mente Matt Groening, quien mediante su personaje animado Lisa Simpson, se da el lujo de cuestionar problemas globales, criticar el imperialismo y reivindicar valores sociales en crisis.
Los niños tienen una capacidad increíble para detectar las cosas importantes. "Lo esencial es invisible a los ojos, sólo se ve con el corazón", lo dijo otro niño, El Principito, del escritor francés, Antoine Saint Exhupery.
Sería bueno que los periodistas, así como los niños, miráramos el mundo más con el corazón que con los ojos.
Recuerdo también a Trevor, el estudiante de la película Cadena de Favores, quien ideó una estrategia muy interesante para mejorar el mundo. Trevor tuvo la capacidad de soñar y llevar a la acción su idea.
Hay muchos niños de ficción que me llegaron profundo con mensajes sublimes. Pero los que me dan vida e inspiran diariamente, son los niños reales, los de mi tierra.
Cada día rumbo al trabajo, un niño me ofrece caramelos, una estampita o me pide una moneda en el ómnibus o en la calle, uno que capaz tenía sólo 10 años intentó asaltarme una vez y otros me rodearon en una parada de bus incitados por adolescentes mayores.
El caso de un pequeño indígena de 4 años, con un grave cuadro de desnutrición me desgarró el alma en febrero de este año y la muerte por hambre de una niña de 6 años en Misiones, mientras un senador corrupto celebró su cumpleaños con opulencia y descaro, me indignó aún más.
Mi relación con los niños es bastante particular, está cargada de experiencias un poco contradictorias. Me sorprenden todos los días con sus ocurrencias, con sus realidades, con sus preguntas inesperadas, simples pero difíciles de responder. Es más fácil ser entrevistada por un niño que entrevistarlo. Lo reconozco.
Confieso que escribir este artículo sobre niñez y periodismo no es casualidad. Obedece en parte, al reconocimiento otorgado por la organización Global Infancia, que este año me declaró "Periodista Amiga de la Niñez", junto a otros colegas.
Sinceramente aún me pregunto si lo merezco. Lo cierto y concreto es que agradezco la mención, y quiero decir que representa para mí un gran compromiso.
No sé si aún puedo considerarme periodista, eso lo dirán los lectores. Siguiendo la temática del artículo, me siento una niña transitando en el sendero de los medios de comunicación. Llevo poco más de 4 años en este ámbito y aprendo todos los días algo nuevo.
De lo único que estoy segura es que todos los periodistas deberían ser amigos de los niños, e incluso recordar todos los días a ese niño interno que todos llevamos dentro. Si así fuese, creo que el periodismo sería más esperanzador.
Los niños son mis maestros de periodismo, porque ellos me ayudan a no perder la sensibilidad, a correr riesgos, a veces sin dimensionar el peligro, a decir lo que siento sin temor a lo que digan o piensen los demás, a soñar nuevos mundos posibles, a buscar la verdad y tratar de conservar la credibilidad. De ellos, podría aprender eternamente.